29.4.13

Lo que podríamos haber sido. (a pedido de fulanita)

(Olerte me sabía extraño. Una extrañeza exquisita, necesaria. Y cada tanto alguna ausencia prolongada sonaba hostil en mis manos, sobre las piernas...mis sábanas. Olerte me sabía a revivir, y a tristeza de tanto en tanto. Te ibas y el vacío no me entraba...¡Tanta inmensidad!
Los domingos solía sentir que no me querías más, como si de repente tanto olernos, tanto revuelo de ropas y calor y
Los martes a la tarde se me ocurre pensar si                                                                 pero realmente así.
Quizás exagero y en realidad no es que no me quieras sino la vida, duelos, cambios, renovaciones.Una aolscdencia dtraía que nos cuesta a todos.
Esto que titulamos "la  rutina" nunca nos pone felices, porque se disparata y deja de ser rutina, por eso tanta angustia. Y  ora te fuiste.)

"Pensá lo felices que podríamos haber sido" dije.
"No me pidas supositorios. Te quiero y duele." Me gritó en silencio, atragantado por un adiós que nunca terminó de pronunciar.
"¿Cómo haces para dolerme tanto?" alcancé a esbozar pero llegó la rabia, y brindamos (aunque no debíamos).

(Esas cuestiones que por llanto nunca terminamos de aclarar...
Podríamos haber sido.
HABER SIDO. PODRÍAMOS.
 Hoy no somos, no hay, no podemos.  Pero estamos, algo sigue encendido aunque a más no poder...
Yo también te quiero.
Y duele.)

1 comentario: